Colombia impone derechos compensatorios a las importaciones de etanol desde EEUU
La investigación arrojó que sí hay daño en el desempeño de los indicadores económicos y financieros de los productores nacionales, como consecuencia de las importaciones subvencionadas.
Por recomendación del Comité de Prácticas Comerciales, el Gobierno Nacional decidió imponer derechos compensatorios definitivos a la importación de alcohol carburante (etanol), procedente de EEUU, por un periodo de dos años.
A través de la Resolución 069, del 30 de abril del 2020, se establece un derecho específico de USD0,06646 por kilogramo, que es equivalente a la cuantía de la subvención (subsidio) encontrada durante la investigación realizada. Este valor es adicional al arancel aplicable al etanol, según el Acuerdo Comercial con EEUU. La medida será publicada en el Diario Oficial No. 51.307 del 7 de mayo del 2020.
Durante la investigación se estableció que del total del maíz subsidiado en EEUU, el 68,7 % se destina a la producción de alcohol carburante. Bajo ese escenario, se determinó que la cuantía de la subvención otorgada equivalía a USD0,06646 por kilogramo que representa, con los precios de las últimas importaciones declaradas, a un arancel ad valorem de 13,2 %.
La investigación arrojó que sí hay daño en el desempeño de los indicadores económicos y financieros de los productores nacionales, debido a las importaciones subvencionadas. Se encontró relación de causalidad entre el incremento de esas compras externas, originarias de EEUU durante el periodo objeto de investigación. También fue evidente el desempeño negativo en los indicadores económicos y financieros de los productores nacionales.
El proceso inició por solicitud de Fedebiocombustibles, en representación de los productores nacionales, y la investigación tardó 15 meses. Tal como lo establece la norma nacional y el Acuerdo sobre Subvenciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC), el proceso surtió todas las etapas reglamentarias, se brindaron todas las garantías a las partes y en todo momento se respetó el derecho de defensa y el debido proceso.
En este lapso de tiempo participaron como partes interesadas las autoridades del gobierno de Estados Unidos, así como algunos representantes de exportadores y gremios de ese país.