‘Sería equivocado cambiar los aranceles por razones políticas’
La idea de subirles los aranceles a los textiles y confecciones importados al 37,9% –incluida en el Plan Nacional de Desarrollo (PND)– endureció las posiciones de diferentes gremios, por el impacto que tendría la medida en el bolsillo de los colombianos y la institucionalidad del país.
Hoy, las prendas que ingresan a Colombia con valores inferiores al umbral de USD10 por kilo tienen aranceles del 40%, mientras que las que se encuentran entre este límite y los USD20 por kilo, pagan un impuesto del 15%. Con la propuesta que llegó al proyecto del PND, el tributo que se tendría que desembolsar por las confecciones que estén entre USD10 y USD20 por kilo, sería de 37,9%. Pero no solo eso, otra de las cosas que se buscan es que el umbral sea más alto y pase a ser de USD20 por kilo.
“Sería equivocado cambiar los aranceles por razones políticas, el Congreso se está tomando facultades que no tiene”, dijo Eduardo Visbal Rey, vicepresidente de Fenalco, agregando que una de las cosas que más le preocupan sobre el tema es que se afecte la institucionalidad del país.
A este tema no fue ajeno el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, quien manifestó que “en el tema arancelario hay que ser respetuosos de la institucionalidad”, pues “es el Gobierno Nacional el que tiene la potestad de realizar las intervenciones en este tema”, y señaló que las “diferencias grandes en materia arancelaria pueden ser razones para generar mayores niveles de contrabando en una economía”.
Precisamente, una de las banderas de los industriales del sector textil que apoyan el incremento de este gravamen para las importaciones es, además de “proteger la industria nacional”, combatir el contrabando. A este argumento se opone el directivo de Fenalco, quien asegura que “subir los aranceles incrementaría el contrabando” y que una medida de este tipo “no los va a defender como ellos creen (al gremio del sector textil)”.
Visbal asegura esto, basado en que el incremento arancelario del 15% al 37,9% haría que aumenten los costos de producción de grandes empresas en el país, lo que, “sin duda terminaría afectando los precios al consumidor”. Y esto, sumado a un sector de los textiles y las confecciones que tiene “una producción muy costosa, poca tecnología y poca capacidad para incrementar la producción”, lo cual le estaría “entregando el negocio al contrabando”.
Por su parte, Bruce Mac Master, presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), fue otros de los que mostró su descontento. En declaraciones recogidas por el periódico El Tiempo, el presidente del gremio de industriales señaló –ante la inclusión de la iniciativa en el PND– que el artículo es inconstitucional. “Es imposible que se tramite por una vía que no sea el Ejecutivo; por lo tanto, es un engaño a los confeccionistas, un espejismo. Están dando una discusión falsa”, agregó.
Ya se han planteado otro tipo de salidas para que las pretensiones de una parte del gremio de los confeccionistas no conlleven a golpear las importaciones. Mientras que el ministro Restrepo hace énfasis en que “hay que seguir fortaleciendo espacios interinstitucionales como la Mesa Permanente de Facilitación del Comercio Exterior, y las estrategias anticontrabando, con la participación de sectores productivos, el Estado y la policía aduanera”, Visbal piensa que para que al sector se le reduzcan los costos de producción y puedan ser más competitivos, hay que “bajar los impuestos”.
Uno de los puntos en los que coincidieron el funcionario a cargo de la cartera de Comercio y Visbal es en que hay que trabajar en seguir reforzando entidades como la Dian. Algo similar planteó Javier Díaz Molina, presidente de Analdex, durante el XI Foro Nacional de Importadores que realizó la asociación que lidera, en el que afirmó que más que subir los aranceles, el trabajo que hay que hacer va por el lado de “simplificar los procesos” y “fortalecer las instituciones”, para potenciar la economía en el país.
Por ahora, ante el panorama que pinta el artículo incluido en el PND, las potenciales consecuencias parecen estar más cercanas que las soluciones alternativas que se proponen, según los expertos. Más allá del crecimiento del contrabando y el ‘golpe’ a la institucionalidad, los temas que preocupan a Fenalco tienen que ver con los consumidores y la mano de obra.
“Eso va a disminuir las importaciones y la producción nacional porque el comercio no puede comprar, en ese orden, los precios al consumidor, sobre todo de clases media y baja, van a subir, y después ellos (productores) a quién le venden”, dijo el vicepresidente de la Federación de Comerciantes, resaltando que otro impacto sería que “afectaría el empleo e incrementaría la informalidad”, concluyó.
Otro de los puntos que se analiza en el sector es que un cambio de este tipo daría pie para que otros sectores empiecen a buscar la vía legislativa para competirles a las importaciones. Además, Fenalco no descarta que el artículo pueda tener un impacto negativo, sobre todo con Panamá, que ya ha tenido litigios con Colombia ante la OMC años atrás. Por el momento, el artículo continúa, con grandes oposiciones, en el PND.