Un estudio de Procomer señaló las oportunidades para exportar alimentos frescos y procesados a Emiratos Árabes Unidos

El estudio de mercado de alimentos frescos y procesados en Emiratos Árabes Unidos, destaca que este territorio es la segunda economía más grande (en términos del PIB) de los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo, organización que busca la integración económica de la región, superado solo por Arabia Saudita. Además, el país se caracteriza por altos niveles de ingreso per cápita (USD62.416 según la paridad del poder adquisitivo en el 2018). Su principal centro de negocios y mayor mercado de consumo es Dubái, que concentra el 30% del total de EAU, altos flujos turísticos (15,8 millones de personas en el 2017) y concentración de expatriados (alrededor de 85% de la población).

Para determinar las oportunidades, el análisis se basó en las coincidencias entre la demanda y la oferta del sector, lo cual destacó seis categorías o productos con potencial:

• Frutas frescas: en esta categoría existen cuatro oportunidades concretas:
  • Frutas exóticas distintas a las ofrecidas por países del sureste asiático, dirigidas a segmentos de mediano-alto ingreso.
  • Hay ventanas de oportunidad ante escasez de oferta del sureste asiático por problemas de clima.
  • Frutas orgánicas tienen cada vez más demanda y sus precios pueden duplicar a las convencionales.
  • Piña y banano (tanto convencional y orgánico), lo cual evidencia la importancia de continuar con el posicionamiento en el mercado.
• Café: en grano, molido o instantáneo, para su venta en supermercados y cafeterías de especialidad. Es importante para el consumidor emiratí el origen y certificaciones (por ejemplo, orgánico y Fairtrade), así como marcas privadas.
• Snacks dulces: en esta categoría se detectaron oportunidades para cuatro productos:
  • Galletas dirigidas al mercado premium, que tengan enfoque en libres de azúcares o gluten y funcionales.
  • Frutas secas como piña convencional u orgánica principalmente, cuyos envíos sean a granel o bajo formato de marca privada.
  • Chocolate oscuro para el mercado premium, con certificaciones como orgánicas y Fairtrade, o bien con sabores de frutas tropicales.
  • Confitería enfocada en el segmento premium, y productos libres de azúcar.
• Agua: enriquecidas y también dirigida al segmento premium dirigido a un consumidor de mediano-alto ingreso con una alta relevancia en el envase.
• Frutas procesadas: en esta categoría se encontró opciones para: 
  • Jugos, purés y concentrados como insumo para la producción, industrial local o regional.
  • Congelados de piña u otras frutas tropicales (papaya o mango).
  • En conserva como piña enlatada y palmito.
• Salsas y preparaciones: alto consumo de salsas picantes, libres de aditivos, sabores que combinen frutas tropicales y venta bajo esquema de marcas privadas.

“Emiratos Árabes Unidos es un mercado estratégico para Costa Rica porque, además de su alto poder adquisitivo, funciona como plataforma para el comercio con Medio Oriente y Norte de África, es decir, funciona como un centro de reexportaciones hacia la región, con un crecimiento promedio de 12% entre el 2008 y el 2017. Por esta razón, se sigue estudiando el mercado y participando activamente en actividades de promoción comercial, como la reciente feria de alimentos Gulfood Dubái, donde seis empresas nacionales tuvieron la oportunidad de asistir”, afirmó Marta Esquivel, Directora de Inteligencia Comercial de Procomer.

El estudio también señala consideraciones importantes que las empresas nacionales deben hacer para tomar la decisión de incursionar en este mercado:

• Buscar el apoyo de un buen importador o distribuidor, que cuente con licencia comercial en vigor, experiencia en el mercado, un adecuado grado de implantación territorial y red de contactos.
• Certificación Halal: es indispensable solamente para productos derivados de la lista de alimentos ilícitos según la Sharia (Ley Islámica).
• Contar con certificaciones de calidad solicitadas por la Unión Europea y EE UU aportan valor (por ejemplo: Global Gap, HACCP, ISO, FSSC 22000, entre otras).
• Es un mercado complejo, en el cual la empresa debe realizar inversión para el posicionamiento del producto y marca, así como la búsqueda del establecimiento de una relación sólida, de cercanía con los agentes comerciales que se traducen en visitas al país, participación en ferias y constancia en el seguimiento de los negocios.
• Visión para construir una relación de largo plazo y estratégica: esto empieza por conocer su cultura, especialmente en el ámbito de la negociación que habitualmente se enfoca en la búsqueda de precios bajos; conocer los gustos y preferencias de su población (como el enfoque en productos naturales) y, por último, dar seguimiento a las negociaciones como señal de interés por el beneficio mutuo. El aporte de referencias de proyectos o actividades en otros países árabes genera mayor confianza con los potenciales compradores.
• Debe reconfirmar con el importador/distribuidor los requisitos de ingreso, especialmente en relación con certificaciones, ya que los requisitos pueden variar en cada emirato.
• Aportar por la diferenciación como certificaciones, productos innovadores y enfocados en el mercado de premium, ya que la competencia por precios con países cercanos es alta.