La producción de espárragos en México aumentó un 10,4%
El valor de la producción de una hectárea de este cultivo, y su potencial exportador, entre los factores que lo hacen atractivo.
La producción nacional de espárragos creció un 10,4% en el 2020 en comparación con el año previo, al totalizar 301.000 toneladas, tendencia que ha ido al alza en los últimos años.
Datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) señalan que en el 2017 se produjeron 246.000 toneladas, un año después la producción aumentó a 278.000 toneladas, aunque en el 2019 tuvo una ligera baja a 272.000 toneladas.
México es el tercer productor mundial de espárragos. Así, el 30% del volumen producido del vegetal en el mundo tiene origen en los campos del país.
Durante el 2020, la mayor parte se exportó a EE UU, además de España, Chile, Japón, Belice, Reino Unido, Panamá, Hong Kong y Emiratos Árabes Unidos, entre otros.
Las principales entidades productoras son Sonora, Guanajuato, Baja California Sur y Baja California, estados que concentran 80,4% del volumen cosechado nacional que equivale a 287 mil toneladas.
El resto de los estados donde también se cultivan espárragos son Querétaro, Michoacán, Coahuila, Sinaloa, Aguascalientes, Durango, Tlaxcala, Jalisco, San Luis Potosí, México e Hidalgo.
La cosecha de este cultivo se desarrolla a lo largo del año, con picos de producción durante los meses de diciembre a abril; en estos cinco meses se obtiene más del 70% de la oferta disponible en el país.
El espárrago es un cultivo perenne con un ciclo de 18 meses, y al alcanzar un metro de altura se empieza con su cosecha; el valor de la producción de una hectárea de este cultivo, así como su potencial exportador, representan un atractivo para agricultores organizados.
En nuestro país seis de cada diez toneladas se cosechan en los cuatro primeros meses del año.
El consumo anual per cápita en México es de 0,8 kilogramos y su participación en la producción nacional de hortalizas es de 1,8%.
La hortaliza contiene proteína vegetal, carbohidratos, fibra; de las vitaminas destacan la C, B3, B1, B2, B6, B9 y A y aportan minerales como potasio, calcio, fósforo, magnesio, sodio, zinc y yodo.