Reformas a la ley
Sector textil salvadoreño busca dinamizar la inversión extranjera
En febrero pasado, se aprobó una reforma a la Ley de Zonas Francas que buscaba responder a las exigencias de la OMC. Los empresarios ven en la actualización de la ley nuevas oportunidades de inversión extranjera. Algunas ya comienzan a ser efectivas.
El optimismo está presente en el sector textil salvadoreño. Las cifras positivas de exportaciones al cierre del 2012 y la recién aprobada reforma a la Ley de Zonas Francas se han convertido en un incentivo para los empresarios. Este último factor es resultado de más de cinco años de proceso de consultas para cambiar la ley.
“(La Reforma) potencia enormemente la posibilidad de atraer inversión extranjera directa hacia el sector, cosa que había estado estancada, precisamente por la incertidumbre sobre lo que pasaría con la ley”, afirmó a la prensa local en febrero pasado el presidente de la Cámara de la Industria Textil, Confección y Zonas Francas (Camtex).
Casi tres meses después Camtex sostiene la postura y el optimismo sobre nuevos proyectos. En estos meses, algunas empresas ya han confirmado proyectos que venían madurando, tal es el caso de la compañía Pettenati, de origen brasileño, que espera invertir cerca de USD10 millones en el trascurso del 2013. Otras empresas, sin embargo, están aún evaluando el panorama como CS Central America, que -de decidirse- inyectaría unos USD10 millones este mismo año.
Entre otras cosas, el decreto modificó el sistema de exoneración de impuestos a las exportaciones de las empresas bajo régimen de zona franca, respondiendo así a las demandas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) que había dado como plazo a países como El Salvador hasta el 2015.
El proceso de consulta con los diferentes actores afectados comenzó en el 2007, año en el que terminó el plazo de aplicación de subsidios a la exportación otorgado por la OMC a países de renta media-baja.
Desde entonces, El Salvador se ha mantenido durante un periodo de prórroga para disolver paulatinamente sus programas de subsidios de exportación.
Desde el inicio de la consulta para reformar la ley, cada subsector presentó su paquete de modificaciones. Al final, entre los más importantes aprobados se encuentra el que una empresa puede ser exonerada de renta e impuestos municipales hasta por 10 años si está ubicada en el área metropolitana de San Salvador.
El beneficio aumenta a 15 años si la nueva empresa se encuentra fuera de la capital. Pero la exoneración no llega sola, para que una empresa sea beneficiada con estas disposiciones fiscales, las autoridades salvadoreñas ahora tomarán en cuenta el nivel de inversión y de generación de empleos que realicen.
La modificación a la ley también permite la venta local de productos de las empresas bajo el régimen de zona franca, algo que hasta ahora no era posible. Pero para ello deberán pagar los impuestos de importación “por el componente no nacional incorporado al producto final”, según reza la Ley ya modificada. El Ministerio de Economía deberá velar porque los mercados se mantengan “organizados”.
Durante el proceso de consulta, los sindicatos pedían sus propias reformas, entre ellas la suspensión temporal de los beneficios si una empresa cometía una falta grave o muy grave. Así como también la obligación de un seguro que garantizara la indemnización de los empleados en caso de cierre de operaciones repentino. Sin embargo, la mayor parte de las enmiendas propuestas por los sindicatos no se tuvieron en cuenta.
“La reforma no nos dejó un buen sabor de boca, porque aprobaron a su conveniencia y no a favor de los trabajadores como muchos dicen”, manifestó a Legiscomex.com, una de las integrantes de Mujeres Transformando, una organización de empleadas de maquilas.
Según datos del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) en el 2012, el sector textil y de confección generó un promedio de 70.600 empleos. El dato refleja una reducción de cerca de 2.000 empleos en relación al año anterior, pese a haber aumentado la producción y las exportaciones.
Dentro del régimen de zonas francas en El Salvador, la gran mayoría de empresas forman parte del sector textil y de confección. Y es precisamente esa porción de compañías las que más abona a las cifras de exportaciones e inversión extranjera.
En el 2012, el total de ventas externas del sector alcanzó USD2.196 millones, según datos que Camtex proporcionó a Legiscomex.com. Dicha cifra representa un 3,4% de crecimiento en relación al año anterior. El informe del Banco Central de Reserva de El Salvador (BCR), por su parte, da cuenta que dicho monto representó el 41% de las exportaciones totales del país.
La actividad del sector no para ahí. Este año ya ha dado indicios de buenos negocios. “Es importante señalar que el sector ha iniciado el 2013 con un crecimiento del 6,5% en el mes de enero, con un valor de exportación de USD164 millones, siendo el mayor valor de exportación registrado en ese mes desde el 2008”, reza el informe emitido por Camtex.
Los tejidos sintéticos y artificiales son los que mantienen activa la participación de los textiles en el comercio exterior. Estos productos aportaron un total de USD505,2 millones.
En cuanto a destinos, el principal país al que el sector textil envía productos es EE UU (78%), le siguen los países centroamericanos (18%) y en tercer lugar México (1,6%). Cabe destacar como dato curioso que dentro de los países centroamericanos, Honduras es el socio comercial más importante. Solo el año pasado El Salvador le vendió USD267 millones en productos textiles, pese a ser uno de sus fuertes competidores en cuanto a maquilas.
Tras años de negociación, las modificaciones a la Ley de Zonas Francas han entrado en vigencia, va en marcha y para los empresarios salvadoreños promete más inversión. Hasta ahora, el desempeño del sector ha sido positivo y serán las cifras al cierre del 2013 las que confirmen si en realidad la reforma afecta o no las inversiones. Pero más allá de estos factores, El Salvador está -tras años de retraso- cumpliendo finalmente las demandas de la OMC.