Relaciones comerciales Colombia - China / Introducción
Colombia busca construir una relación de largo plazo con el gigante asiático
Aunque las relaciones políticas y diplomáticas entre Colombia y China están próximas a cumplir 30 años, ha sido en los últimos años que el intercambio comercial se ha vuelto más dinámico.
Actualmente, Colombia es el octavo proveedor sudamericano de las importaciones chinas, mientras que es el cuarto receptor de las exportaciones de este país asiático en la región.
De acuerdo con el Observatorio Económico del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, el comercio global entre Colombia y China ha mantenido una tendencia creciente en los últimos años, al pasar de USD771,3 millones, en el 2003, a USD4.114 millones, en el 2007, lo que significó un incremento promedio anual del 52%, durante este periodo.
Entre el 2003 y el 2007, las exportaciones colombianas hacia este destino se incrementaron en un 96%, puesto que pasaron de USD82,6 millones a USD784 millones.
Por su parte, las importaciones colombianas originarias de China pasaron de USD688,7 millones, en el 2003, a USD3.326, en el 2007, lo que representó un crecimiento promedio anual del 45% en los últimos cinco años.
Las compras que Colombia realiza a este país asiático se caracterizan por ser bastante diversificadas, ya que en el 2007 se registraron cerca de 4.100 ítem arancelarios.
De acuerdo con el viceministro de Comercio Exterior de Colombia, Eduardo Muñoz, a pesar de que las exportaciones al gigante asiático se han incrementado considerablemente, el mercado chino no es una alternativa inmediata para que los exportadores colombianos diversifiquen sus ventas internacionales, debido a que ingresar a ese mercado requiere de un proceso previo por parte de los empresarios.
“Los procesos de negociación, por cuestiones culturales de ese país, son lentos y requieren un previo conocimiento de las partes, la preparación de la oferta exportable a las características y condiciones del consumidor chino, entre otros aspectos. Todo ello, hace que las posibilidades en ese mercado sean una perspectiva importante, pero hacia el futuro”, explica Muñoz.
Para Diego Rengifo, vicepresidente técnico de la Asociación de Comercio Exterior (Analdex) precisamente han sido estas características del mercado chino las que han hecho que la decisión de negociar un acuerdo comercial con esta nación se posponga y se considere como opción a largo plazo y no como algo prioritario dentro de la política de comercio exterior colombiana.
Según Rengifo, lo clave en este momento es la promoción de las inversiones de los empresarios chinos en Colombia, principalmente en sectores como petróleo, carbón y textiles.
De ahí que la directriz del actual Gobierno para el manejo de las relaciones políticas y comerciales con China se suscribe bajo la “Estrategia para el Asia Pacífico” que han diseñado el Ministerio de Relaciones Exteriores en coordinación con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, cuyo objetivo principal es acelerar el proceso de inserción de la economía colombiana en la región asiática en los próximos años y dejar sentadas las bases para una estrategia de largo plazo.
La “Estrategia para el Asia Pacífico” tiene como eje la atracción de inversión extranjera directa de los países de esa región hacia Colombia. En este contexto se busca: