Economía regional
Centroamérica y su lucha por atraer inversionistas
La minería y la manufactura son los dos grandes sectores que atraen a inversionistas extranjeros. El Triángulo Norte enfrenta con mayor dificultad atraer más capital. En el lado sur de la región, Nicaragua destaca como ejemplo de mejora y atracción de capital en el sector minero.
Centroamérica vive en una constante carrera por atraer inversión extranjera directa (IED). Sin embargo, el desempeño por subregión varía. Según el último informe sobre IED de la Comisión Económica para Latinoamérica y el Caribe (Cepal), la subregión del sur de Centroamérica destaca con mayores inversiones. El triángulo Norte, por su parte, suma a sus problemas un bajo desempeño en lo que atracción de inversiones se refiere.
El país que lidera la IED en Centroamérica es Panamá. Dicho país recibió cerca de USD 4,000 millones en 2013, le sigue Costa Rica con USD 2,682 millones y Nicaragua –aunque la cifra es más modesta- destaca con USD 848.6 millones dado que la cifra equivale al 64% de su producto interno bruto.
La minería y la manufactura son los dos sectores que reciben más inversiones. El informe sobre IED de la Cepal, asegura que si bien a nivel latinoamericano la minería ha recibido menos inversiones desde el cierre del proyecto Pascua Lama en Chile; en Centroamérica el sector minero ha sido uno de los más favorecidos con IED.
Las grandes trasnacionales también han sumado a las cifras de inversiones extranjeras en Centroamérica. Según la Cepal, las manufacturas orientadas a las exportaciones han incrementado sus cifras en la región, en especial en países como El Salvador y Nicaragua. Aunque las cifras regionales, de acuerdo al informe, podrían verse afectada debido a la retirada de Intel de Costa Rica anunciada para este año.
Su economía no figura entre las más prosperas de la región pero en 2013 Nicaragua tuvo un muy buen desempeño en lo que a IED se refiere. Según la Cepal, los montos de inversiones en Nicaragua fueron igual al 64% del PIB. La mayor parte de las inversiones se registraron en el sector minero. El oro y la plata brillaron como nunca tras convertirse en el rubro que más aportó a las exportaciones del país. Para 2014 las proyecciones del sector minero son buenas y esperan crecer al menos un 10% en exportaciones.
“Las inversiones han sido muy importantes para la minería en los últimos cinco años y se han ido encaminando al desarrollo en tecnología, maquinaria, equipo y en desarrollar una industria que ha llegado a ser el primer rubro de exportación en el 2013”, afirmó a Legiscomex, el vicepresidente de la Cámara Minera de Nicaragua (Caminic), Dennis Lanzas.
El Centro de Trámites de Exportaciones de Nicaragua (Cetrex) registró en 2013 un total de USD 431.5 millones por las ventas externas de oro. De hecho, la producción de oro creció un 20% y desplazó a la carne bovina del primer lugar en exportaciones nicaragüenses el año pasado.
“Definitivamente hemos crecido. De USD 60 millones que se exportaban en 2007 pasamos a los más de USD 400 en 2013. Eso es excepcional, algo que solamente con coraje y dinero se puede lograr y para entrar en el juego hemos defendido un marco legal seguro para que hayan inversionistas que quieran jugar”, aseguró Lanzas.
Lo cierto es que lo han logrado. Incluso cuando la Cepal reconoce en su informe que la minería y su auge en la última década han generado conflictos en los países donde se han dado proyectos e inversiones. Centroamérica no ha sido la excepción en cuanto a esos conflictos. En países como El Salvador, por ejemplo, muy poco se ha logrado en materia minera debido a la fuerte oposición de organizaciones y comunidades.
“Independientemente del crecimiento de las inversiones en minería, las demandas están aumentando porque las comunidades afectadas cuentan cada vez con más información y más capacidad para hacer oír su voz”, reza el informe de la Cepal.
El representante de Caminic, sin embargo, aseguró que el modelo que han desarrollado en Nicaragua “pretende ser un ejemplo” para los países de la región. Lanzas afirmó que el sector minero cuenta con el respaldo del gobierno nicaragüense y otras organizaciones, factor que ha sido clave para el éxito de los proyectos que están desarrollando.
“Nuestra minería está enfocada no solo en el recurso sino que también en llevar bonanza a las comunidades. Trabajamos de la mano las empresas, comunidades y el gobierno. Por ahora va funcionando bien”, dijo Lanzas.
El representante de Caminic reconoció que no siempre han tenido la aceptación total de la población pero aseguró que han crecido mucho en la relación con las comunidades. El trabajo por mantener una buena comunicación deberá seguir, ya que para 2014 los mineros nicaragüenses esperan aumentar al menos un 10% su producción. En 2015 esperan abrir dos proyectos: La India, de la empresa británica Condor Gold, y San Albino, de la empresa canadiense Golden Reign Resources. Ambos proyectos sumarían, al menos, USD 165 millones en inversión.
En oposición a la zona Sur de Centroamérica, donde hasta la economía más pequeña cuenta con orgullo sus avances, el llamado Triángulo Norte (Guatemala, Honduras y El Salvador) lucha más bien por sobrevivir o al menos mantener las cifras de los últimos años.
En esa zona, Guatemala surgió como el gran ganador en 2013 con un crecimiento en IED de 5.8%, no era el crecimiento que esperaban los guatemaltecos, pero al menos crecieron un poco y cerraron con USD 1,308 millones en IED. Durante el primer trimestre de 2014 las esperanzas de crecer se mantienen ya que Guatemala recibió USD 378 millones, un 7.5% más que en el mismo período en el año anterior.
Por su parte, Honduras no llegó ni al 1% de crecimiento en IED en 2013, pero tampoco bajó pese a sus problemas políticos y a la violencia que le acecha. Lograr una cifra de USD 1,059 millones en inversiones al cierre del año fue un buen logro. En el primer trimestre de 2014, según datos del Banco Central de Honduras, la IED ha sufrido una leve baja, con un total de USD 239.6 millones la cifra reportada es de cerca de USD 61 millones menos que en el mismo período el año anterior.
Pero, el mayor problema lo presenta El Salvador. Por segunda vez en los últimos 3 años, este país centroamericano cerró con cifras negativas. En 2013, la cifra de IED fue de apenas USD 140 millones, 70.9% menos que en 2012. En 2014, el panorama no pinta mejor. Según el informe presentado por el Consejo Monetario Centroamericano en junio pasado, Fitch Rating, Standard and Poor’s y Moody’s mantuvieron inalterables los riesgos y retos que enfrenta El Salvador en lo que a IED concierne. La calificación BB- Negativa persiste y los flujos de IED en el primer trismestre no han mejorado.
“No podemos mentirnos. El país sigue teniendo unos flujos compasivamente bajos de inversión extranjera. Siempre hay inversión, pero no tan alta, ni tan dinámica como muchos de nosotros quisiéramos”, declaró en mayo pasado al periódico local La Prensa Gráfica, Giovanni Berti, director ejecutivo de la Agencia de Promoción de Inversión y Exportaciones de El Salvador (PROESA).
El Salvador, según la Cepal, es una de las economías pequeñas en donde las manufacturas orientadas a la exportación han incrementado levemente sus inversiones en los últimos dos años. Así mismo, los servicios para la exportación aunque aportan cantidades modestas de IED se han vuelto clave para la generación de empleos. El Salvador figura en la lista de países que ofrecen incentivos fiscales a inversionistas extranjeros de ese rubro.
Centroamérica tiene un reto grande para atraer inversión extranjera en 2014. Sobre todo en el Triángulo Norte. La minería y la manufactura perfilan como dos sectores de los que pueden tomar ventaja los gobiernos y empresarios.
Los mineros nicaragüenses lo tienen claro. “Sabemos que como sector minero somos estratégicos para el desarrollo del país, una palanca bien colocada para complementar las inversiones, las exportaciones y los salarios. Todo eso ayuda a desarrollar el país”, afirmó Lanzas.
Por ahora, las cifras de IED durante el primer semestre pintan positivamente para algunos países de la región. El Salvador se sigue quedando a la cola de la lista. Los esfuerzos de empresarios y gobiernos podrían cambiar las cifras. Por ahora, el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales sugiere tres cosas: promover políticas activas para la atracción de inversiones; inculcar el conocimiento de los factores que los inversionistas toman en cuenta para instalarse en determinada nación; y finalmente la adopción de una política de atracción regional basada en tres pilares: la diferenciación, la cooperación y la negociación en bloque. El final de 2014 determinará si los esfuerzos locales y regionales resultan en cifras positivas de inversiones.