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El concepto es liderado por la Organización de Naciones Unidas (ONU)

Producción más limpia: práctica aplicable a todos los sectores, que optimiza recursos de la cadena productiva

Consiste en el uso adecuado de agua, energía, residuos. En algunos casos, se requieren nuevas tecnologías y en otros, optimizar las existentes.

Por: Johanna Guevara Olier
Enviada especial de Legiscomex.com
Medellín (Colombia)*

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Switcher, empresa textilera suiza líder en la venta de camisetas y ropa informal, con operaciones en India, Portugal y la China, le exige a uno de sus proveedores tratar diariamente para sus tintes de ropa cerca de 800.000 litros de agua y usar solo 125 toneladas de sal, así como 2.700 toneladas de madera.

Al mismo tiempo, somete a su proveedor a evaluaciones anuales sobre el impacto ambiental de su producción y le pide que garantice buenas condiciones para sus trabajadores en empleo, educación, salud y transporte. Estas líneas de acción las aplica con todos sus socios, por lo que se constituye en un modelo de producción más limpia (PML).

De acuerdo con el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), la PML es una estrategia preventiva integrada a los procesos, productos y servicios orientada a mejorar la eficiencia y reducir los riesgos de los seres humanos y del ambiente.

La producción más limpia incluye a su vez, las buenas prácticas agrícolas (BPA) y de manufactura (BPM). Según el caso, puede requerir la implementación de nuevas tecnologías u optimizar las ya existentes. También, se debe tener en cuenta que las mejoras deben estar presentes en toda la cadena y no al final.

“Es tener una producción mediante un ahorro eficiente del agua, la energía y la disminución de residuos”, afirma la ingeniera contratista del Centro Nacional de Producción más Limpia y Tecnologías Ambientales (Cnpmlta) de Medellín (Colombia), Paula Andrea Morales.

Con los residuos, por ejemplo, lo recomendable es separarlos por tipo de desecho: los reciclables, es decir, plástico, papel, cartón, chatarra y vidrio. También están los peligrosos, como los materiales inflamables, tóxicos, corrosivos y reactivos, como los aceites. Por último, están los ordinarios, que son aquellos que no se pueden aprovechar, como el papel manchado con grasa.

“Hay que costear permanentemente cada uno de los factores de riesgo ambiental y caracterizar los vertimientos, consumos de agua, energía y volumen de desperdicios. Una vez analizados estos capítulos, se pueden determinar los ciclos de vida del producto y las acciones correctivas que se requieren”, expresa el coordinador de sostenibilidad de los sectores de la Corporación Regional de Antioquia (Corantioquia) en Colombia, Édgar Vélez.

Agrega que cuando surgió el concepto de PML solo aplicaba a las industrias. Mientras que, hoy en día, aplica para todos los sectores y servicios.

Para el gerente de proyectos del Instituto Federal Suizo de Investigaciones y Prueba de Materiales y Tecnologías Limpias, Marcel Gauch, las empresas del ramo textil son las que más se resisten a implementar este tipo de metodologías, pues cuesta trabajo convencerlos de que aún hay espacio para mejorar.

Ventajas y desventajas de la PML

De acuerdo con el Centro Ecuatoriano de Producción más Limpia (CEPL), los beneficios pueden agruparse de la siguiente forma:

1. Comerciales:

  • Permiten el acceso a nuevos mercados.

  • Mejoran la imagen de la empresa y del producto.

  • Facilitan la diversificación de artículos a partir del aprovechamiento de los residuos.

  • Constituyen el paso previo al ecodiseño.

    2. Económicos:

  • Reducen costos por traslado y disposición de desechos.

  • Generan ahorros mediante la utilización eficiente de la materia prima, agua y energía eléctrica.

  • Evitan el pago de multas o clausuras por incumplimiento de la legislación ambiental.

  • Mejoran las condiciones de seguridad y salud ocupacional.

    “La problemática de la PML es que no se gana dinero directamente, pero sí se reducen costos en la cadena. Por esto, al empezar, es difícil convencer de que un peso reducido equivale a uno ganado”, asegura Gauch.

    Cada vez son mayores las exigencias de mercados internacionales como el europeo o el chino en estándares ambientales. Por ello, implementar un sistema de PML hace más competitiva a la empresa, se convierte en un factor de diferenciación y otorga un mayor margen de negociación en el mercado. Esta es la lección que dejan experiencias como la de Switcher, que se convierte en un modelo por seguir en estas prácticas.


    Fases para implementar la producción limpia

  • Designación del equipo: conformar un grupo que lidere el tema es vital. Se requiere de participación y del apoyo pleno de las directivas de la organización. En esta etapa se hace una lista de las operaciones prioritarias.

  • Revisión de las fases del proceso: se refiere al diagrama de flujo del proceso, la revisión del origen de los desechos y la asignación de costos.

  • Generación de oportunidades: es el reconocimiento de opciones para minimizar residuos, energía o agua. En este punto, se seleccionan las alternativas viables.

  • Identificación de alternativas de PML: es la evaluación de la viabilidad técnica, financiera y de aspectos ambientales.

  • Implementación de soluciones: incluye la preparación de la empresa, monitoreo y el examen de resultados.

  • Mantenimiento del proceso: busca garantizar la continuidad de las medidas adaptadas , ya que es fundamental para reducir el impacto ambiental.

    Fuente: Centro Nacional de Producción más Limpia y Tecnologías Ambientales (Cnpmlta).



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