Cosméticos y aseo personal en Venezuela
Venezolanos invierten 4,5% de su ingreso en productos para el cuidado personal
Las demás preparaciones capilares fue la categoría de producto más importada por Venezuela en el 2007, debido a que concentró el 16% del mercado.
La mujer venezolana siempre se ha preocupado por su apariencia personal. No obstante, en los últimos años los hombres de ese país se han sumado a esta tendencia, lo que ha disparado el consumo de cosméticos y productos para el cuidado personal. Estas dos características ubican a Venezuela como una de las cinco naciones que más invierte en este tipo de artículos.
“El venezolano tiene una gran conexión tanto con el tema de higiene como con el tema de la belleza. Hay una cultura de la limpieza. La población venezolana, incluso la de menores ingresos, inculca el tema de la limpieza corporal como un valor fundamental en la vida”, sostiene un informe de la consultora Datanálisis realizado sobre este tema.
Según cálculos de la Cámara de la Industria de Cosméticos y Afines (Caveinca), este sector mueve al año cerca de USD1.300 millones, lo que lo convierte en un mercado muy atractivo para los importadores, ya que, a diferencia de otros rubros, el consumo de este tipo de bienes no sucumbe ante las crisis económicas ni a la inflación.
De hecho, los venezolanos destinan más dinero de su presupuesto en productos para el cuidado personal de lo que pueden invertir mensualmente en categorías como medicina, carne o educación.
Esta tendencia ha hecho que Venezuela sea considerada como un país muy atractivo para compañías de Colombia, México, EE UU, Brasil y España, entre otros, que hoy proveen a este país sudamericano más del 50% de los productos que consume.
Durante los tres últimos años, las importaciones venezolanas de cosméticos y productos de aseo personal se han incrementado en un 77%, al pasar de USD243,6 millones, en el 2005, a USD668,9 millones, en el 2007.
Y las cifras pueden seguir al alza, si se tiene en cuenta que cada día se constituyen en Venezuela nuevas peluquerías, centros de estética, SPA y clínicas especializadas. Además, la venta por catálogo sigue disparada, ya que se ha convertido en una alternativa para que muchas personas generen ingresos adicionales.