Venezuela
La crisis venezolana golpeó el comercio exterior
La crisis económica y la escasez de dólares ha provocado una severa caída en las importaciones venezolanas este año, mientras el petróleo, que aporta el 96% de las exportaciones del país, registró una disminución de precios y eso significó menos dólares para las arcas nacionales.
La noticia era esperada pero no dejó de inquietar a los economistas: las importaciones de Venezuela cayeron un 21,72% durante el primer semestre de este año con relación al mismo periodo del 2013, según reportó el Instituto Nacional de Estadística (INE).
“Es un dato muy revelador de lo que está ocurriendo en el país. El sector privado no tiene dólares para realizar las importaciones necesarias y el mercado interno está desabastecido. En un país que depende de las importaciones porque produce muy poco esto es muy perturbador”, dijo a Lesgiscomex.com el economista del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IIES) de la Universidad de Los Andes, José Miguel Rondón.
Para el maestro en Economía por la Universidad de Maryland, la caída de las importaciones “nos indica la gravedad de la crisis venezolana y la lentitud en la asignación de divisas a las empresas” por parte del Gobierno, que mantiene un control de cambios desde el 2003 y que maneja tres diferentes tipo de paridades cambiarias: la preferencial, de 6,30 bolívares por dólar; la conocida como Sicad I, que es de 11,50 bolívares por dólar, y la Sicad II, de 50,00 bolívares por dólar.
Según el INE, durante el primer semestre de este año, las compras externas de bienes, insumos y maquinarias alcanzaron los USD17.300 millones, cifra menor en USD4.800 millones a la registrada durante los primeros seis meses del año anterior.
Entre los principales socios comerciales de Venezuela, la más importante baja de importaciones se produjo en las procedentes de China, con una caída del 36,80%, y de Colombia, con una contracción de 27,18%, señaló el INE.
El economista José Guerra sostuvo que los desequilibrios en las finanzas públicas, por el excesivo gasto y endeudamiento del gobierno y sus empresas, en especial la gigante Petróleos de Venezuela (PDVSA), han llevado el déficit fiscal desde hace dos años a niveles que rondan el 15% “y ese hueco es el que consume gran parte de las divisas”.
Según cifras oficiales, durante los primeros siete meses de este año el gobierno asignó al sector privado USD13.200 millones en divisas a las tasas preferencial y Sicad I, un 27% menos que en el mismo periodo del 2012 (del año pasado no existen datos).
A la tasa Sicad II, que se comenzó a implementar este año, el gobierno asigna unos USD630 millones al mes, que resultan insuficientes para satisfacer los requerimientos de insumos, inventarios y equipos de las empresas privadas.
“La palabra más pronunciada en Venezuela en el último año es escasez. Tenemos escasez de alimentos, de productos básicos, de medicamentos, de dólares, de autopartes, de automóviles… de todo”, aseguró Rondón.
Las exportaciones venezolanas, 96% de las cuales son petróleo, también han sido golpeadas este año por una conjugación de factores externos e internos. La producción de PDVSA, que triplicó el número de trabajadores en los últimos 15 años, de 40.000 a 120.000, es puesta en duda hasta por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), a la que pertenece este país.
Según PDVSA, su producción de crudo llega a 2,8 millones de barriles diarios, mientras que la OPEP reporta que esta es a 2,3 millones de barriles diarios.
La gigante estatal no solo está lejos de producir la riqueza suficiente para sacar a flote las finanzas públicas, sino en que en buena parte el uso político que se le ha dado explica la crisis económica que vive el país.
Gracias al auge petrolero de los últimos años, PDVSA ha recibido por concepto de exportaciones en los últimos seis años USD455.000 millones, según cifras del Banco Central de Venezuela (BCV), la mayor parte de las cuales se han destinado a financiar el proyecto político del fallecido presidente Hugo Chávez y de su sucesor Nicolás Maduro.
En el 2005, Chávez creó el Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden), un mecanismo de inversión social que opera con transferencias directas de PDVSA y el BCV provenientes de las exportaciones petroleras y el cual ha manejado desde entonces USD125.000 millones que se destinaron a subsidios sociales y proyectos productivos que en muchos casos acaban convertidos en elefantes blancos.
En momentos de apremio como los que vive, la economía venezolana enfrenta presiones adicionales del frente externo por la caída de los precios internacionales del petróleo, lo cual amenaza con comprometer aún más la disponibilidad de divisas.
Entre el 27 de junio y el 27 de agosto pasados, la cesta petrolera venezolana registró un descenso de 8,87 dólares al pasar de 100, 64 dólares a 91,77 dólares en ese lapso.
El valor promedio del barril de crudo venezolano en lo que va de año se sitúa en USD96,27, debajo de los 98,08 del 2013 y de los USD103,42 de 2012.
La consultoría Síntesis Financiera estimó que de mantenerse la tendencia a la baja, el promedio para la cesta petrolera venezolana sería de USD94,49 dólares el barril en el 2014, lo que se traduciría en una caída del 6,4% en las exportaciones de crudo del país este año. Estas llegarían a USD73.000 millones, mientras que en el 2013 alcanzaron los USD78.000 millones.
De acuerdo con esta proyección, el intercambio comercial de Venezuela, que el año pasado llegó a USD135.000 millones, terminaría el 2014 con una reducción del 15%.
Para Rondón, la baja en el comercio del país “es apenas un reflejo de la severa crisis económica, con recesión, que estamos enfrentando”.
La consultora Ecoanalítica estima que este año el Producto Interno Bruto (PIB) registrará una contracción de entre el 2,0% y el 2,5%, lo que se traducirá en un deterior del ingreso per cápita de entre el 4,0% y el 5,0%, mientras que la inflación superará los 70 puntos porcentuales.
Rondón comentó que la escasez de dólares, que impide realizar las importaciones necesarias, “es un síntoma de un problema económico de fondo y no la causa de los problemas”.
Dijo que Venezuela sufre escasez de divisas como consecuencia del manejo de recursos que se da en varios niveles de la administración pública y de un conjunto de “desequilibrios financieros”. Señaló que las fuentes de dólares son las exportaciones petroleras y no petroleras, la inversión extranjera y el endeudamiento externo.
Indicó que durante los últimos 15 años, las exportaciones no petroleras se han reducido tanto en términos absolutos como relativos ya que pasaron del 31% del total a sólo 4% en ese lapso. En términos absolutos, se desplomaron en 31%, de USD5.579 millones a USD3.840 millones.
“Nuestra dependencia del petróleo creció en forma exponencial a pesar de que el crudo registró un aumento histórico de precios”, indicó el economista.
Cuando Chávez llegó al poder, en 1999, el precio del barril de crudo era de USD15,24, mientras que el año pasado promedió USD98,08 dólares, lo que significó que el valor del petróleo se multiplicó casi siete veces.
“Lo que hicimos fue dilapidar la riqueza petrolera y echamos por la borda, en gastos improductivos, en ineficacia administrativa y en corrupción, la oportunidad de transformar al país con esa riqueza”, consideró Rondón.
El ex ministro de Planificación, Jorge Giordani, y la ex presidenta del Banco Central, Edmée Betancourt, han denunciado que una larga lista de empresas fachada o “de maletín” compraron entre el 2012 y el 2013 más de USD25.000 millones en divisas a tasas preferenciales para luego negociarlas en forma fraudulenta en el mercado negro en operaciones en las cuales funcionarios públicos y empresarios del sector privado actuaron coludidos.
La deuda pública externa llegó a USD105.000 millones, mientras que la interna legaría a USD66.000 al tipo de cambio preferente, lo que sumado equivale a cerca del 100% del PIB si esta se calcula a la tasa preferencial de 6,30 bolívares por dólar.
Las reservas internacionales cerraron el pasado miércoles 16 de abril en USD21.409 millones, cifra menor en 13% a la registrada hace un año, y sólo USD2.700 millones son reservas líquidas.
De acuerdo con estimaciones de analistas privados, el déficit fiscal del sector público es del orden del 15% del PIB debido a un enorme gasto gubernamental, que supera los USD100.000 millones anuales.
El economista Luis Mata señaló que para equilibrar las cuentas fiscales el gobierno requiere que los precios del petróleo se ubiquen en un nivel de 140 dólares por barril, un 52% por arriba de la cotización actual. "La estabilidad fiscal de Venezuela se torna un objetivo imposible de alcanzar en el corto plazo de mantenerse la práctica de gasto público vigente y de prolongar los subsidios”, aseveró.
Rondón sostuvo que “con este panorama, es apenas normal que el comercio exterior refleje la situación crítica y recesiva que estamos afrontando”.